Agradecer las

grandes cosas

de la vida,

un abrazo,

una palabra

de aliento,

un amigo.

Te diría tantas cosas que no puedo decir con palabras, cada vez que no puedo decir lo que siento me quedo muda, talvez es lo mejor, a veces es mas claro un gesto que una palabra. A veces los gestos son más tercos que las palabras, uno puede cerrar la boca, pero enmudecer el cuerpo es casi imposible, salvo pequeñas excepciones, claro. Salvo que te paralicen el cuerpo con un gesto tan implacable que te dejen durísimo. Tan duro como yo ahora, que te besaría y solo así podría decirte lo que siento por vos. Y a veces los gestos son tan claros que nos dejan mudos, casi con la boca abierta.

El amor te transforma, podés estar en medio de una depresión, tocando fondo y aparece el amor, y la tristeza te parece algo lejano y ajeno. El amor da vuelta tu mundo, cuando llega nada es lo que era, y jamás volvera a ser lo que fué. El amor nos dá una fuerza sobrenatural, nos vuelve superhéroes, nos hace superpoderosos. El amor te abre los ojos, te ayuda a enfrentar tus miedos y te ayuda a conocerte. El amor te puede curar. El amor te puede rescatar. El amor te puede salvar. El amor es todo lo que se necesita para vivir.

El amor siempre nos saca una sonrisa y nos muestra el mundo de diferentes colores.

¿Sabes a dónde van las palabras q no se dijeron? ¿A dónde va lo que queres hacer y no haces? ¿A dónde va lo que queres decir y no decis? ¿A dónde va lo que no te permitís sentir? Nos gustaría que lo que no decimos caiga en el olvido, pero lo que no decimos se nos acumula en el cuerpo, nos llena el alma de gritos mudos. Lo que no decimos se transforma en insomnio, en dolor de garganta. Lo que no decimos se transforma en nostalgia, en destiempo. Lo que no decimos se transforma en debe, en deuda, en asignatura pendiente. Las palabras que no decimos se transforman en insatisfacción, en tristeza, en frustración. Lo que no decimos no muere, nos mata. Lo que no decimos se transforma en trauma, en veneno que mata el alma. Lo que no decís te encierra en el pasado. Lo que no decimos se transforma en herida abierta.

En estos ojos mas que palabras, mas que cualquier cosa que dije. Como los cielos que tornan al gris mis esperanzas son justas sobre la grieta abierta. Así que la historia se va y hay algo que debes saber antes de que yo camine lejos y llegue al final: Nunca quiero estar sin ti. Ho no, escucha, me voy ahora sabes lo que siento por ti, no hay final y debo haber estado mal sin ti. Ho, no allí voy estoy cayendo no hay control, así que ahora sabes. Me siento muy bien, ansiando el oxigeno en esto… me dejaste vacía. ¿Te iras corriendo? ¿Puedes hacerte cargo de esto? Porque te necesito para que me digas que quizás esto es atrevido pero tengo la esperanza de que estarás para un final feliz. No quiero mirar atrás cuando te cuento lo que pienso sobre ti. Así que la historia se va, si tú de verdad lo sabes así que no seas tonto y no estropees el final.

Nunca te guardes las palabras, deci lo que tengas que decir. No te ahorres las sonrisas, mostrale al mundo tu mas linda expresión. No te guardes los sentimientos, si lo sentis demostralo. Nunca te guardes un te quiero, decicelo. No te guardes la felicidad, compartila con todos. No te ahorres la pasión, esa persona la quiere. Nunca te guardes la risa, es contagiosa. No te guardes los chistes, todos merecen reír. No te ahorres las lágrimas, es peor. Nunca te guardes el amor, es hermoso y vale la pena demostrarlo ~

Cuando cometemos un error en la vida es difícil remediarlo, no es simplemente reinicio y listo, es jugársela por arreglar esa equivocación por tener importancia en lo que hicimos mal, en si lastimamos a alguien. Hay veces que hacemos cosas sin pensar, creemos que estamos haciendo lo mejor y en realidad no nos damos cuenta de que es lo peor y por esa razón puede que lastimemos a la persona que más queremos y todo por nuestra la culpa, es así. No reaccionamos cuando actuamos y recién nos damos cuenta de lo que cometimos cuando alguien nos dice estoy mal, o nosotros mismos nos damos cuenta de que esa persona esta cortada y que le pasa algo. A veces nos damos cuenta solos y otros somos tan ingenuos que tienen que tirarnos una señal para saber lo que pasa. A algunas personas si nos importa que otro este mal, pero tal vez esas personas no se dan cuenta que el daño lo ocasionaron ellos mismos. Lo que pasa es que hacemos las cosas sin intención, por ejemplo no tengo la intención de lastimarte pero lo hago, quiero que seas feliz y te termino lastimando, te quiero demostrar que te amo y me sale todo al revés, se entiende, todo lo que queremos hacer nos sale mal, queremos una relación tranquila y seria y nos vivimos peleando con la persona que más amamos.

Ser libre no es solamente

hacer lo que queremos

ser libres es hacer lo que

queremos sin hacerle

daño a nadie, hay que

ser libres para poder

elegir, ser libres para

elegir.

¿Cómo he llegado aquí? Que me di la vuelta y estabas allí no lo pensé dos veces ni lo racionalicé porque de alguna manera sabía que había algo más que simple química, me refiero a que sabia que estabas un poco dentro de mi pero imagine que era demasiado bueno para ser verdad. Dije: pellízcame. ¿Dónde está la trampa esta vez? No puedo encontrar una sola nube en el cielo ayúdame antes de que me acostumbre a este chico. Dicen que las cosas buenas llevan su tiempo, pero las cosas realmente buenas ocurren en un parpadeo, pensé que las posibilidades de encontrar alguien como tú eran una entre un millón. No puedo creerlo, eres uno entre un millón.

Todo este tiempo he estado buscando amor intentando que las cosas funcionaran porque no eran lo suficientemente buenas hasta que pensé que estaba de un lado a otro dije: se terminó y tropecé en los brazos del único. Me haces reír con las cosas más tontas y dices que soy un diamante sin pulir y cuando estoy enfadada contigo vienes con tu tacto de terciopelo. No puedo creer que sea tan afortunada nunca había sido tan feliz como cada vez que veo ese brillo en tus ojos.

Quién nunca soñó con lo imposible, todos nos imaginamos un cuento de hadas alguna vez, encontrar al gran amor, ser felices para toda la vida, eso es lo que siempre quisimos pero no teníamos idea de la realidad. Al ser chicos vivíamos fantaseando, disfrazados de esos personajes que nos despertaban la emoción de ser chicos, pensábamos que vivíamos en un mundo de colores, que las personas enamoradas duran para toda la vida, hasta que crecemos y caemos en la farsa.

Eso era lo más mágico de ser chicos, estar en un mundo creado por nuestra imaginación, donde cada día teníamos aventuras nuevas, donde éramos completamente felices y cada día brillaba el sol.

Ahora vivimos preocupándonos por si nos enamoramos, es un sentimiento divino y horrible a la vez, un día estás feliz de la vida y al otro te preguntas para qué mierda existe el amor, por qué me tuve que enamorar, por qué sufro tanto por vos, por qué. Por qué la vida es así si en las películas solo hay sonrisas y mucho amor, y en la realidad solo lagrimas y ganas de no amar jamás.

Esa es mi razón, esa es la razón de que vivo soñando con las historias de amor de las películas, porque aunque me duela estar enamorada, llega un momento en que siento que el mundo es mejor, me siento feliz y así me gusta estar, feliz.

PUTAAAAAA TE AMO COMO ME HACES CAGAR DE RISA, ERA NICO AJAJAJJAJAA MIRA AHI SE CONECTO COSO Y TIENE UNA FOTO DE LOS CABESILLAS AJAJAJAJA AL FINAL TE CHANTE LAS GALLETITAS AJAJAJAJA TE RE CAGUE PUTA TE AMOOO ESTUPIDA

Hay besos que se dan con la mirada, hay besos enigmáticos, hay besos por prohibidos, verdaderos. Hay besos que calcinan y que hieren. Hay besos con los labios dejan huellas, como un campo de sol entre dos hielos. Hay besos que parecen azucenas por sublimes, ingenuos y por puros. Hay besos que producen desvarios de amorosa pasión, ardiente y loca. En los besos palpita el amor la traicion i los dolores.

Estar con alguien es una elección, es algo que elegimos para creer que estamos bien, para sentir que estamos en compañía, compartiendo momentos y cosas con la persona que queremos... Es fácil no tener que elegir, y hacer de nuestras vidas una rutina ir siempre por el mismo camino, nunca permitir una sorpresa pero eso no es vivir, es el pánico que nos da tener que elegir.. Siempre que tenemos opciones, hay que elegir y arriesgarse a jugársela por una sola opción, siempre que elegimos, vamos a perder algo. El terror al abandono, a sufrir y arrepentirnos de nuestra elección puede ser nuestro peor enemigo, por eso no hay que tenerle miedo a las opciones. Aunque el miedo no es no saber lo que queremos, sino no estar seguros, porque sino dudamos, no probamos y no buscamos nunca vamos a saber lo que queremos... El mundo esta lleno de posibilidades, y no por una elección hay que perder las demás, pero si elegimos todo no elegimos nada. Cuando somos estructurados, rígidos y no nos corremos del camino, pensamos que no somos libres... Pero cuando pensamos que en verdad lo somos, estamos presos de nuestra propia indecisión. Algunos no eligen por miedo a perder algo; otros por miedo a perder todo y terminan sin elegir nada... ¡Nadie sabe que es peor! Cuando uno no elige, la vida elige por uno y eso no es ser libre, ser libre es animarse a elegir un lugar donde quedarse, una opción, jugarse por una relación y no temerle ni al compromiso, ni a lo que pueda pasar después. Uno se siente libre, pero es un engaño, si uno no elige nada, no tiene nada. Hay muchas razones para decir no, y muchas razones para decir si, pero no podemos permitirnos no elegir, ya que el elegir es darnos oportunidades a probar y a obtener cambios.

Todos somos sujetos divididos, queremos una cosa y hacemos lo opuesto, quien sabe porque lo hacemos, es la naturaleza humana, el mas contenido tiene su cara desatada y el mas bueno su cara bestial, esa dualidad nos da volumen no somos planos de una sola cara. Una de esas fuerzas ocultas va a ganar en algún momento y cuando pase eso se va a definir quien somos en verdad. A veces en el acto de odiar amamos y en el de rechazar deseamos porque aunque no lo soportemos somos contradictorios. La contradicción nos mantiene vivos, nos hace avanzar. Una parte nuestra dice si y la otra no y en esa contradicción esta la vida.

Muchos esperan en silencio detectar una señal en el ser amado, esperan ser deseados. A otros, lo que los seduce, es sentirse deseados. A otros, nos seduce lo opuesto, sentirse no deseados. A otros, los seduce lo prohibido, lo imposible, lo que no pueden tener.